La cirugía de catarata es en la actualidad el procedimiento quirúrgico más realizado en el mundo, por su elevada prevalencia.
En un reciente estudio sobre la prevalencia y causas de pérdida visual en Europa1, se encontró que, en el año 2015, la catarata era la primera causa de ceguera (entendida como agudeza visual menor de 0.15 en escala decimal en el mejor ojo del paciente), seguida por la degeneración macular asociada a la edad, glaucoma, defectos de graduación sin corregir, retinopatía diabética y otras dolencias corneales. Además, de las mencionadas, junto con los defectos de graduación, es la única que se puede corregir. Por tanto, es una ceguera reversible si el resto del ojo no presenta otras patologías.
El cristalino es como una lenteja, transparente, que colabora en el enfoque de la imagen sobre la retina. La catarata consiste en la opacificación de esta “lenteja”. En la actualidad, el único tratamiento disponible para la catarata es la cirugía. Antiguamente, las técnicas intracapsulares obligaban a realizar una incisión amplia, comprendiendo casi los 180º superiores, se extraía todo el cristalino y, o bien se corregía la graduación en gafa, o bien se implantaba una lente de apoyo angular en cámara anterior (cuando estas estuvieron disponibles).
Cuando se dispuso de lentes de cámara posterior, se recuperó el interés por las técnicas extracapsulares, donde se extrae la catarata a través de una apertura en la capsula anterior del cristalino, pero dejando el resto. Es decir, volviendo al “símil de la lenteja”, se retira el contenido de la misma, pero dejando la piel, lo que será el saco donde se implantará la lente intraocular artificial que hará las veces del cristalino antes de opacificarse. Esta técnica también requería de una incisión generosa (6-7mm) y suturas que habitualmente causaban astigmatismo durante el postoperatorio.
Hoy día este tipo de cirugías se reservan para casos seleccionados o incluso en casos donde la cirugía convencional se complica, se puede reconvertir con una de estas técnicas antiguas.
Actualmente, el estándar para la cirugía de catarata es la facoemulsificación, lo que permite extraer la catarata a través de incisiones de 2 a 3mm. Con un sistema de ultrasonidos la catarata se deshace y se aspira, tras lo que se implanta la lente que restaurará la visión, siendo este sistema menos agresivo que las técnicas previas y el postoperatorio mucho más rápido. Así, hoy ya no se espera a que la catarata “este madura”, ya que las exigencias laborales del mundo actual y dada la seguridad de la técnica, hace razonable intervenir la catarata cuando al paciente le limita su vida normal (laboral, ocio, etc). Incluso en pacientes de mayor edad se ha estudiado2,3 que, tras operar un solo ojo, habiendo catarata en ambos, el riesgo de caídas y fracturas asociadas disminuye significativamente.
Aunque existen complicaciones, como en cualquier cirugía, se han minimizado con el paso de los años y el mayor conocimiento y dominio de la técnica, lo que permite prever posibles complicaciones, siendo en la actualidad uno de los procedimientos quirúrgicos más seguros de la ciencia médica. Además, el uso de povidona yodada preoperatoriamente y antibióticos intraoculares tras la cirugía, han reducido drásticamente la incidencia de infecciones4.
Alguna de las circunstancias que pueden hacer la cirugía más laboriosa es la insuficiente dilatación de la pupila o el cierre de la misma durante la intervención, más frecuente en pacientes que toman tratamientos para la hiperplasia benigna de próstata, que con frecuencia afectan al iris, causando lo que se denomina Sindrome de Iris Flacido. En el siguiente video, podemos ver el ejemplo del segundo ojo de un caso así, donde directamente, por la experiencia vivida en el otro ojo, dilatamos la pupila mecánicamente con retractores de iris en previsión de posibles complicaciones, completando la cirugía sin incidencias.
Otras circunstancias, como la debilidad zonular, pueden dificultar la cirugía, e incluso si esta es muy acusada llegar a imposibilitar el implante de la lente en el saco capsular y precisar de una segunda intervención para implantarla. En el último video, se ve como la catarata presenta una debilidad zonular, detectada intraoperatoriamente, que puede ser manejada con los mismos ganchos de iris manteniendo la capsula “in situ” y tensándola al final de la cirugía con un anillo de tensión capsular.
La tecnología laser de femtosegundo parece que aportará más seguridad en algunos pasos quirúrgicos, pero hasta la fecha no hay estudios que evidencien una mejoría en los resultados de la cirugía convencional5,6, ya que tan solo hace algunos pasos de la cirugía e incluir tal láser en la practica habitual a día de hoy encarece el proceso, ralentiza el tiempo quirúrgico y no aporta ventajas reales, actualmente, sobre las maniobras realizadas por un cirujano experto. En cualquier caso, seguiremos expectantes ante las últimas novedades en los estudios más recientes.
Bibliofrafía
1.Bourne RRA, Jonas JB, Bron AM, Cicinelli MV, Das A, Flaxman SR, Friedman DS, Keeffe JE, Kempen JH, Leasher J, Limburg H, Naidoo K, Pesudovs K, Peto T, Saadine J, Silvester AJ, Tahhan N, Taylor HR, Varma R, Wong TY, Resnikoff S; Vision Loss Expert Group of the Global Burden of Disease Study. Prevalence and causes of vision loss in high-income countries and in Eastern and Central Europe in 2015: magnitude, temporal trends and projections. Br J Ophthalmol. 2018 Mar 15.
2. Harwood RH, Foss AJ, Osborn F, Gregson RM, Zaman A, Masud T. Falls and health status in elderly women following first eye cataract surgery: a randomised controlled trial. Br J Ophthalmol. 2005 Jan;89(1):53-9.
3. Sach TH, Foss AJ, Gregson RM, Zaman A, Osborn F, Masud T, Harwood RH. Falls and health status in elderly women following first eye cataract surgery: an economic evaluation conducted alongside a randomised controlled trial. Br J Ophthalmol. 2007 Dec;91(12):1675-9
4. Haripriya A, Chang DF, Ravindran RD. Endophthalmitis Reduction with Intracameral Moxifloxacin Prophylaxis: Analysis of 600 000 Surgeries.Ophthalmology. 2017 Jun;124(6):768-775.
5. Popovic M, Campos-Möller X, Schlenker MB, Ahmed II. Efficacy and Safety of Femtosecond Laser-Assisted Cataract Surgery Compared with Manual Cataract Surgery: A Meta-Analysis of 14 567 Eyes. Ophthalmology. 2016 Oct;123(10):2113-26.
6. Berk TA, Schlenker MB, Campos-Möller X, Pereira AM, Ahmed IIK. Visual and Refractive Outcomes in Manual versus Femtosecond Laser-Assisted Cataract Surgery: A Single-Center Retrospective Cohort Analysis of 1838 Eyes. Ophthalmology. 2018 Mar 6.